Hemos
observado cómo han iniciado ya, la construcción del Proyecto Habitacional
“Terrazas del Paraíso”, en las faldas de nuestro cerro... Pese a que el proceso de defensa de la zona
comunitaria en la parte alta (claramente marcada por una reja), va por buen
camino, hemos visto como se ha comenzado a “desbastar” el resto de la zona (las
faldas), tomando en consideración únicamente la intención de un camino
vehicular exclusivo… escuchamos al
inicio del proyecto, que la cía. constructora
mantendría y cuidaría a los “árboles importantes”, y al parecer, esta
consideración o adjetivo, aplicaba exclusivamente a los que no se interpondrían al plan… árboles que significan y que han albergado
decenas de años de vida, han sido ya talados y sus restos están por doquier,
para construir únicamente el camino de ingreso al proyecto… si así de lamentable es el inicio de esta mala
película, cómo será el resto!!!... y es que aunque esto era un escenario
posible, verlo resulta muy doloroso.
foto tomada del facebook de Joffre Soria Cevallos |
Con
lamentable impotencia (por tratarse de un predio adquirido), somos testigos del
inicio de la destrucción dentro de esta zona, que durante toda nuestra vida,
hemos considerado como parte del bosque y de la ciudadela (pues estamos seguros
que así lo lograron los “pioneros”, pero nunca lo “aterrizaron legalmente”)… y nos referimos a “somos”, a quienes tratamos
de pisar “despacio”, intentando dejar la menor huella posible en nuestro andar,
recogiendo y reusando nuestros propios desperdicios vitales… Negar que toda esta zona es (..o fue), parte
de nuestro querido bosque, o que estos terrenos albergarían otro tipo de
proyecto en mentes más progresistas, es negar la posibilidad de días
mejores…
Queda
junto a los árboles caídos, el aprendizaje de estos tropiezos… queda la
satisfacción de haber levantado la voz, mirando de frente... queda la indignación en nuestros
corazones… de haber iniciado un proceso
que no se detendrá por esta derrota. El
aprendizaje, aunque doloroso, nos da la fuerza para continuar… y es que de
seguro vendrán más “visionarios”, con teodolitos y maquinarias bajo las
mangas…
Estamos
en proceso de blindar el resto de la zona y que de ahora en adelante, y
“exclusivamente” para todos, sea un lugar de respeto, comprensión y reconexión
con nuestro Cerro Vivo.
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